lunes, 21 de septiembre de 2009

Nicolás Maquiavelo, un empresario del Siglo XXI

El Príncipe Y El Empresario




POR LIC. FRANCISCO FLORES AGUIRRE

“UNGA”

PAT. ISBNFOAF440309IS3



De las nuevas empresas que se adquieren con el propio financiamiento y el talento personal.



“De los principiados nuevos que se adquieren con las armas propias y el talento personal”



Sobre las recomendaciones estratégicas de Maquiavelo para alcanzar el poder y el éxito.

Stratos = grupo, multitud, ejército =conducir





1o. Para conservar una empresa (Estado) que antes de ser adquirida estaba acostumbrada a regirse por sus propias leyes y a vivir en libertad, es necesario “primero destruirla”; después radicarse en ella y por último dejarla regirse por sus leyes, obligarla a pagar un tributo y establecer una empresa (gobierno) compuesta por un corto número de personas, para que se encargue de velar por la conquista (del mercado).



2o. Conforme a tal conquista, tal premisa, se establece que nunca se debe titubear en ser cruel, y en hacer daño de manera definitiva, de una vez para siempre. De lo contrario, se estaría sujeto a posteriores venganzas por parte de quienes solo hicimos daño parcialmente.



3o. Por eso nunca hay que darle posibilidades al enemigo de que se desquite del daño que le infligimos. Para ello sólo queda destruirlo definitivamente, ya que así no corremos el peligro de ser destruidos nosotros mismos.



4o. Por lo tanto, si no podemos acabar completamente con nuestro enemigo, lo mejor es no hacerle daño, unirnos a él o nombrarlo colaborador pues es más conveniente, -para conservar una posición- el nombrar a colaboradores a enemigos, dado que éstos van a procurar ganarse nuestra confianza - con la que saben no contar- obedecen y realizan mejor todo lo que se les encomiende. En cambio es muy probable que los enemigos no se esfuerzen mucho en ganarse la confianza y simpatía de quien les nombre colaboradores - pues creen que cuenta con ellos - es más fácil que se atrevan a quitarle el poder, al creer que se confía en ellos.





Además, si se beneficia a los enemigos al nombrárseles colaboradores, dejarán de ser tales para convertirse en aliados, lo cual es mejor que tenerlos en contra, si es que se quiere conservar el poder con el que se cuenta.





5o. El que se convierta en Principe (gobernante a Empresario) por el favor de los nobles y contra el pueblo, procederá bien si se empeña en conquistar a este pueblo lo cual le será fácil si lo toma bajo su protección. Porque los hombres se sienten más agradecidos cuando reciben bien de quien sólo esperaban mal, se somete el pueblo más a su bienhechor que si lo hubiese conducido al principado por su voluntad.



6o. El gobernante puede ganarse el pueblo de muchas maneras ... El gobernante necesita contar con la amistad del pueblo, pues de lo contrario no tiene remedio en la adversidad.



7o. Conforme a ésto es más fácil y conveniente contar con el apoyo del pueblo que con el de los aristócratas, pues aquél se conforma con no ser oprimido, mientras los aristócratas son como una “vaca insaciable” a los que nunca se les deja satisfechos con lo que se les ofrece, porque normalmente consideran que deben ser recompensados permanentemente por aquél a quien llevan al poder. Por eso hay que deshacerse de ellos con ayuda del pueblo, acusándolos ante éste de que son personas contrarias a sus intereses, para de esta manera mantener el poder gastando menos.



8o. En conclusión:

Los aristócratas son útiles para lograr poder y riqueza, pero nada más.

El pueblo es útil tanto para llegar al poder como para sostenerse en él con mayor seguridad. Se necesita de los ricos, para llegar al poder, hay que utilizarlos.



9o. Maquiavelo sostiene que existen tres tipos de tropas, (empresas):



Las mercenarias

Las aliadas

Las propias.

Siendo las propias, las más convenientes.

Las mercenarias sólo combaten por el salario que reciben; no titubean en traicionar el gobernante (Empresario.. Príncipe) si su oponente les ofrece más dinero.

Las aliadas combaten al lado de las tropas del gobernante mientras luchan por un objetivo común por el cual se aliaron; pero una vez obtenido este objetivo no tendrían ningún problema estas fuerzas en aliarse con otras para combatir ahora a las del (Príncipe) Gobernante.

Por eso más vale estar solo que atenido a otros. Más vale no confiar en nadie, pues Maquiavelo sostiene que el hombre es malo por naturaleza y busca sólo su propia conveniencia sobre todo en la (empresa) y en la política.



APALANCAMIENTO



“Entre menos se dependa de otros para crear tu empresa de esa manera tendrás éxito. No te apalanques más del 50%”



10. Puede ser útil aliarse con otros. Para lograr nuestras metas es importante poseer uno mismo ciertas cualidades, aparentar tener otras y evitar ciertos defectos.

Maquiavelo sostiene que para alcanzar el éxito político y empresarial es necesario, mas, no suficiente ser: fuerte, inteligente, astuto, cruel, hipócrita y disimulado.

Debe aparentar ser piadoso, fiel, humano, recto y religioso.

Debe evitar ser débil, pusilámine y afeminado.



11. Otra estrategia para tener el control es: Divide et vinces, mantén desunidos a tus subordinados, distribúyelos, crea conflictos entre ellos.



EL HOMBRE ES PERVERSO POR NATURALEZA

(Tarjetas)



12. La política es una técnica, una obra de arte del gobernante que debe realizar la unificación y reorganización de su comunidad. La virtud fundamental del gobernante no es la justicia, sino la prudencia. “Debe tener en cuenta la naturaleza real de los hombres y las cosas. Si quiere gobernar y triunfar, no debe aspirar a lo mejor sino atenerse a la realidad.



“Porque hay tanta diferencia entre como se vive y cómo se debería vivir que aquel que deja lo que se hace por lo que debería hacerse marcha a su ruina en vez de beneficiarse; pues un hombre que en todas partes quiera hacer profesión de bueno es inevitable que se pierda entre tantos que no lo son, por lo cual, es necesario que todo príncipe que quiera mantenerse aprenda a no ser bueno y a practicarlo a no de acuerdo con la necesidad”. Ya que cuando algunos ocupan posiciones elevadas son juzgados por alguna de estas cualidades que le valen censura y elogio. Uno es llamado pródigo, otro tacaño ... uno es considerado dadivoso, otro rapaz, uno cruel, otro clemente, otro traidor, uno leal; uno afeminado y posilánime; otro decidido y animoso; uno humano, otro soberbio; uno lascivo, otro casto; uno sincero, otro astuto; uno duro, otro débil; uno grave, otro frívolo; uno religioso, otro incrédulo y así...



13. De todo lo anteriormente dicho surge una cuestión: Si vale más ser temido que amado, o amado que temido; pero puesto que es difícil reunirlas y que siempre ha de faltar una, declaro que es más seguro ser temido que amado. Porque de la generalidad de los hombres se puede decir esto: que son ingratos volubles, simuladores, cobardes ante el peligro y ávidos de lucro. Mientras les haces bien son completamente tuyos: te ofrecen su sangre, sus bienes, su vida y la de sus hijos, pues - como antes te expliqué, ninguna necesidad tienes de ellos; pero cuando la necesidad se presenta, se rebelan. Y el príncipe que ha descansado por entero en su palabra va a la ruina al no haber tomado otras providencias; porque las amistades que se adquieren con el dinero y no con la altura y la nobleza del alma son amistades merecidas, pero de las cuales no se dispone, y llegada la oportunidad no se les puede utilizar. Y los hombres tienen menos cuidado en ofender a uno que se haga amar a uno que se haga temer; porque el amor es un vínculo de gratitud que los hombres, perversos por naturaleza, rompen cada vez que quieren beneficiarse; pero el temor es miedo al castigo que no se pierde nunca. No obstante lo cual, es príncipe debe hacerse temer de modo que, si no se granjea el amor, evite el odio, pues no es imposible ser a la vez temido y no odiado...



“Por lo tanto, un príncipe no debe preocuparse porque lo acusen de cruel, siempre y cuando su crueldad tenga por objeto el mantener unidos y fieles a los súbditos; porque con castigos ejemplares será más clemente que aquellos que, por excesiva clemencia, dejan multiplicar los desórdenes, causas de matanzas y saqueos que perjudican a toda la población, mientras que las medidas extremas adoptadas por el príncipe sólo van en contra de uno”.



Si merece forma de cruel, porque sin esta fama jamás podrá tenerse ejército alguno unido y dispuesto a la lucha”.



El azar y la ocasión

¿Cómo se hace un empresario?

¿Cómo se forma? (a un príncipe)

Se puede hablar que de dos formas:

Por el azar (de herencia)

Por sus virtudes.

Por virtudes, Maquiavelo ejemplifica con Moisés, Ciro, Rómulo, Teseo. (De Moisés porque hablaba con Dios).



Si uno se detiene a revisar su vida y sus obras, descubriremos que no deben a la fortuna sino el haberle proporcionado la Ocasión propicia, que fue el material al que ellos dieron la forma conveniente; verdad es que sin esa ocasión, sus méritos de nada hubieran válido; pero también es cierto que, sin sus méritos, era inútil que la ocasión se presentara y aquí es donde hay que aprender a romper paradigmas:



NO HAY NADA MÁS DIFÍCIL DE LLEVAR A CABO, MÁS PELIGROSO DE CONDUCIR O MÁS INCIERTO EN SU DESENLACE, QUE TOMAR LA INICIATIVA DE INTRODUCIR UN NUEVO ORDEN EN LAS COSAS PORQUE EL INNOVADOR TIENE COMO PODEROSOS ENEMIGOS A TODOS AQUELLOS QUE SEAN BENEFICIADOS CON LOS MODELOS PASADOS Y POR TIBIOS DEFENSORES A LOS QUE ESPERAN VER SURGIR ALGO NUEVO.







........MAQUIAVELO.......